Portugal superó a la Argentina
Messi y Cristiano jugaron un tiempo y la gente se quedó con ganas. En el descuento,
Guerreiro aprovechó un error defensivo y la mandó a la red.
La selección
Argentina y Portugal jugaban en el Old Trafford de Manchester algo más que un
amistoso internacional de FIFA. Era una propicia oportunidad para ver en cancha
a los dos astros máximos del fútbol actual: Lionel Messi y Cristiano Ronaldo.
Pero ambos terminaron jugando solo un tiempo y el público presente en el
estadio, más los millones de televidentes, se quedaron con el paladar ansioso
por disfrutar más tiempo de la magia de estos dos fenómenos.
En definitiva,
la Argentina mordió el polvo de la derrota en el final, en tiempo de descuento,
tras una acción individual de Cuaresma, un centro y una captura de Raphael
Guerreiro, quien se tiró de palomita para batir a Nahuel Guzmán ante la
pasividad de la defensa y para darle el triunfo a los lusos por 1 a 0 sobre el
elenco del Tata Martino.
En un primer
tiempo que se encendió con el correr de los minutos, fue Lío Messi el que
comenzó a encender la lámpara y a enloquecer a los defensores portugueses con
sus providenciales arranques por la derecha y sus endiabladas diagonales. Así,
el Seleccionado estuvo cerca del primer gol, en los primeros minutos.
Anteriormente, había sido un remate de Di María el que encendió a los miles de
hinchas que se convocaron en el teatro de los sueños para ver en acción a los
dos mejores jugadores del mundo de la actualidad.
Por su parte,
Cristiano mostró estiletazos de su magia, como un taco exquisito en la
construcción de una acción de riesgo, pero aún no fue la usina que Portugal
necesita para llegar con peligro al arco de Nahuel Guzmán.
En el
complemento, la estrella del amistoso se apagó con las salidas de Messi y de
Cristiano Ronaldo. Las competencias europeas y la exigencia de las
megaestrellas obliga a cuidarlos en esta clase de partidos, pero fue el público
el que se quedó con ganas de seguir viéndolos un rato más. Nicolás Gaitán
reemplazó a la Pulga, mientras que Cuaresma ingresó en lugar de CR7.
El complemento
naufragó en intrascendencia y poco mostraron ambos hasta el final. Y en el
epílogo del juego, cuando todo parecía cerrarse en tablas y con empate en cero,
apareció el testazo de Guerreiro para decretar una nueva derrota de la
Selección Argentina en la era Martino.
Foto: Ronaldo llevándose el balón.
